Nadie podía prever lo que traería el 2020. En cuestión de semanas, el mundo cambió. Las calles se vaciaron, las persianas bajaron y la frase «distanciamiento social» se convirtió en parte de nuestro día a día. Para miles de negocios, esto significó una sola cosa: sus puertas físicas, su principal fuente de ingresos, se cerraron indefinidamente.
En medio de la crisis y la incertidumbre, surgió un héroe inesperado: el e-commerce.
De repente, vender online dejó de ser «algo bueno que tener» para convertirse en la única línea de vida. Vimos a restaurantes transformarse en servicios de delivery con menús online, a tiendas de ropa lanzar sus catálogos en Instagram y a empresas B2B crear portales para sus clientes. Fue la mayor aceleración digital de la historia, impulsada por la necesidad de sobrevivir.
Aquellos que ya tenían una tienda online funcional pudieron pivotar rápidamente. Aquellos que no, se enfrentaron a una carrera contra el tiempo para construir una.
La lección de Julio de 2020 que nunca debemos olvidar: Tu presencia digital no es un complemento a tu negocio físico; es el núcleo de un negocio resiliente. Depender de un solo canal de ventas es una vulnerabilidad que ninguna empresa puede permitirse. La capacidad de vender tus productos o servicios 24/7, sin importar lo que pase en el mundo exterior, es la máxima póliza de seguro.
¿Tu negocio está preparado para operar 100% en digital si fuera necesario? Tener una tienda online no es solo subir tus productos a una plataforma. Requiere una estrategia de marketing para atraer tráfico, un proceso de pago sin fricciones y una logística que garantice la satisfacción del cliente.
Si la pandemia te enseñó que necesitas una presencia de e-commerce más fuerte, estás en el lugar correcto. En Negocios Digitales Inteligentes construimos tiendas online que venden.
No esperes a la próxima crisis. Hablemos hoy sobre cómo construir o potenciar tu tienda online.
